Todo mundo nos hemos encontrado con personas poco atractivas que tienen mucho éxito con el sexo opuesto, y no necesariamente es porque tengan mucho dinero, buen carácter o algunos otros atributos ocultos sino porque conocen bien cómo coquetear y darse a desear. No sólo en los lugares tradicionales para conocer gente como discos, bares, puedes coquetear si no también en parques, restaurantes ¡Y hasta en línea puede haber oportunidad de seducir a la persona que te gusta!

En el arte de la seducción no cabe duda que el lenguaje corporal en el flirteo y el comportamiento son claves de suma importancia para transmitir nuestro interés.

Una de las técnicas de coqueteo más usadas es el contacto visual. Los ojos tienen un poder muy fuerte y si son usados correctamente pueden derretir hasta a las personas más frías. Desafortunadamente, por educación nos acostumbramos a evitar el contacto visual constante porque puede ser incómodo en la mayoría de las situaciones sociales, pero usar la mirada para explorar los ojos de esa persona que deseas seducir demuestra tu curiosidad sobre lo que tiene que decir y a todos nos gusta ser el centro de atención de alguien.

Los hombres seductores de las películas tienen algo en común cuando tratan de coquetearle a una mujer: seguridad. Cuando uno está nervioso actúa sin pensar, la voz se quiebra y nos encorvamos porque inconscientemente estamos tratando de protegernos del peligro. Cuando llega el momento de seducir a alguien no debemos olvidar modular nuestro tono de voz, lo que no significa fingir tener una voz más atractiva, sino que hablar pausado y con seguridad es la mejor manera de desenvolverse en una conversación con alguien a quien deseamos expresarle nuestro deseo.

Otro punto importante a considerar es que el hacer contacto corporal ayuda a transmitir atracción, pero hay que tener mucho cuidado, usar roces y caricias cuando no son esperados o bienvenidos es algo que nos puede poner en una situación delicada, si te propasas todo puede resultar bastante embarazoso. Es por eso que lo mejor es tener paciencia y dejar que poco a poco la otra persona vaya cediendo. Una forma de saber es si permite el acercamiento o responde a las caricias de manera positiva: nota las reacciones que te irán indicando qué hacer posteriormente.

Muy relacionado al punto anterior está el llevar las cosas con calma. A nadie le gusta alguien que hace movimientos agitados, apresurados. Los movimientos lentos pero seguros son mejor recibidos. Agregarle un toque delicado y tierno a los movimientos del cuerpo resulta más atractivo: llevar todo con suavidad.

Por último, cuida tus palabras. Los cumplidos deben de ser usados sólo cuando sean honestos, las personas que halagan mucho a otras a la larga terminan provocando sospechas de sus intenciones. Tal vez algunas frases que usen los seductores en las películas pueden resultares a ellos, pero en la realidad muy probablemente suenan muy cursis. Es mejor un cumplido de corazón que cientos de cumplidos muy usados, por más bien que se oigan.